Muchas veces me han preguntado cuál es el efecto psicológico de las flores, o mejor dicho qué efecto producen en uno. ¿Por qué a casi todos nos agradan?
La respuesta, a pesar de tener varios matices, es muy sencilla y sobre todo lógica. De acuerdo a los expertos en programación neurolingüística, de los cinco sentidos es el olfato al que más intensamente se anclan los recuerdos, sobre todo aquellos que tienen que ver con momentos gratos. Así que al oler flores frescas es inevitable remontarnos a ese día de las Madres, allá y entonces cuando en kinder participamos en ese festival; o a ese día de campo en que deshojábamos de niños una margarita, o esa flor recibida del primer amor en secundaria... tu ramo de quince años, las flores del jardín de la abuela o su perfume de gardenia…
Las flores también estuvieron presentes desde nuestra edad temprana, en las primeras experiencias del aprendizaje de los colores. ¿Quién no recuerda sus primeros dibujos con crayones? En casi todos está presente por lo menos una flor. De acuerdo con los estudios de psicoterapia Gestalt, la gran mayoría de nuestros patrones actuales de conducta responden a experiencias sensoriales de la niñez.
De este modo, a nivel inconsciente, al estar en contacto con las flores de alguna manera volvemos a ser niños.
La respuesta, a pesar de tener varios matices, es muy sencilla y sobre todo lógica. De acuerdo a los expertos en programación neurolingüística, de los cinco sentidos es el olfato al que más intensamente se anclan los recuerdos, sobre todo aquellos que tienen que ver con momentos gratos. Así que al oler flores frescas es inevitable remontarnos a ese día de las Madres, allá y entonces cuando en kinder participamos en ese festival; o a ese día de campo en que deshojábamos de niños una margarita, o esa flor recibida del primer amor en secundaria... tu ramo de quince años, las flores del jardín de la abuela o su perfume de gardenia…
Las flores también estuvieron presentes desde nuestra edad temprana, en las primeras experiencias del aprendizaje de los colores. ¿Quién no recuerda sus primeros dibujos con crayones? En casi todos está presente por lo menos una flor. De acuerdo con los estudios de psicoterapia Gestalt, la gran mayoría de nuestros patrones actuales de conducta responden a experiencias sensoriales de la niñez.
De este modo, a nivel inconsciente, al estar en contacto con las flores de alguna manera volvemos a ser niños.
A nivel energético, siendo algo vivo aún y tan frágil, nos ayudan a absorber energías del ambiente. Es así como un lugar siempre decorado por flores crea una atmósfera de armonía tan grata para todos.
A tí que te produce regalar flores o que te regalen flores?